Gestión de conflictos

Discutir y debatir sobre un tema es una forma de diálogo que debemos evitar convertir en una batalla entre interlocutores. Aclarar lo expuesto, saber escuchar, adaptar los gestos y mantener una actitud abierta son algunos de los aspectos principales para reforzar el diálogo sin llegar al enfado y evitando posibles momentos de tensión. Aprender a discutir constructivamente ayudará al profesional a gestionar de una manera más adecuada los conflictos; mejorar su comunicación y asertividad y a obtener resultados más satisfactorios en sus relaciones interpersonales.

¿Sabes cuál es la diferencia entre rol y función? ¿Sabrías diferenciar tipos de rol? ¿Conoces las diferentes actitudes que se pueden dar ante una situación conflictiva? Conocer la relación entre rol y función en contextos concretos y aprender a distinguir los diferentes roles que se adoptan, permiten identificar las actitudes que favorecen u obstaculizan la gestión de los conflictos. Conocer dicha diferencia es un factor clave para el abordaje de los conflictos y para mejorar las relaciones interpersonales en el entorno profesional.